martes, 18 de diciembre de 2007

Conduciendo por la izquierda

Dice Agustín: "En las Islas Vírgenes, tanto en las Británicas como en las Estadounidenses, los autos circulan como en Inglaterra (por el carril izquierdo); sin embargo, el volante de los autos esta ubicado del lado izquierdo, como en la mayoría de los países".
El orígen del volante a la derecha o a la izquierda no está fehacientemente determinado. La creencia más generalizada, indica que durante la utilización de la tracción a sangre, se acostumbraba que los conductores (que eran, como el resto de las personas, predominantemente diestros) se situaran a la derecha del vehículo, para poder manejar el látigo con comodidad, y evitar pegarle codazos, -eventualmente latigazos- al acompañante.
Los primeros automóviles tenían el volante al centro, pero luego, para aprovechar mejor el espacio, lo corrieron a la derecha, siguiendo el modelo de los vehículos a caballo.
Con el paso del tiempo, se vieron algunas ventajas ergonómicas de pasar el volante a la izquierda, siempre basándose en que la mayoría de las personas tienen más habilidad en la mano y el brazo derecho:
* Puede manejarse la palanca de cambios con la mano derecha, que exige más control que mantener el volante en posición. En la actualidad, muchos controles que exigen cierta precisión para operarlos con el coche en movimiento, se encuentran al centro del vehículo, siendo manejados por el conductor también con su mano derecha.
* Al manejar marcha atrás, debemos torsionar el cuerpo en sentido horario, y es sencillo hacerlo, pues el cuerpo del conductor gira fácilmente en esa dirección al hacer firme el pie izquierdo, y nos deja libre el pie derecho para el acelerador. En cambio, en los vehículos con volante a la derecha, donde debemos rotar el cuerpo en sentido antihorario; intentar girar el cuerpo de esa manera apoyando el pie izquierdo exige mucho más esfuerzo (el derecho sigue quedando libre para el acelerador).
Como dato anecdótico, en Argentina se circulaba por la izquierda (herencia tal vez de nuestra dependencia inglesa) hasta avanzado ya el siglo XX.