viernes, 21 de septiembre de 2007

Ius sanguinis versus Ius soli

Dice Puma: "Escuchame una cosita, si la inventaron los chinos, es comida china, no importa que los chinos no estuvieran en China en ese momento"
Creo que Puma ha puesto el dedo en la llaga. El chop suey ¿es chino porque lo inventó un chino (independientemente de donde lo haya hecho)?, o ¿es norteamericano porque fue creado en ese país?
Es la vieja dicotomía del Ius sanguinis contra el Ius soli.
Y cito: "Ius sanguinis (del latín, "derecho de sangre") es el criterio jurídico que puede adoptar un ordenamiento para la concesión de la nacionalidad. Según el ius sanguinis, una persona adquiere la nacionalidad de sus ascendientes por el simple hecho de su filiación (biológica o incluso adoptiva), aunque el lugar de nacimiento sea otro país."
El Ius soli, por el contrario, asigna la nacionalidad de una persona en función al territorio donde nació. Y por supuesto, que cuando hablamos de personas, lo hacemos también de sus creaciones.
En general, la primera doctrina es sostenida por los países con gran cantidad de EMIGRANTES, como medio de mantener contacto con ellos, y favorecer la repatriación de sus descendientes. Esto permite, por ejemplo, que personas nacidas en América, hijos de españoles o italianos, puedan gestionar la nacionalidad de sus padres.
La segunda variante se instala en los países americanos, grandes receptores de INMIGRANTES, que querían incorporar rapidamente a esta gente, tentarlos para permanecer y echar raíces.
Estoy convencido que ninguno de los dos imperios (el asiático y el americano) estarán dispuestos a ceder en esta lucha ideológica-gastronómica, llegando (tal vez) sólo a aceptar la doble nacionalidad.
Guerras han comenzado por menos, y es posible que todo esto desemboque en un conflicto donde tenga que terciar las Naciones Unidas, otorgándo al chop suey su propio pasaporte de refugiado.
Perdón, los aburro?