jueves, 11 de octubre de 2007

Feriados

Dice Podeti: "Yo creo que se están haciendo demasiado problema, buscándole complicados nombres de fantasía para disfrazar el origen del efeméride; ¿por qué no nos concentramos en LO VERDADERAMENTE IMPORTANTE y le ponemos, sencillamente, “Día del feriado”? (Esta propuesta puede extenderse al resto de los días conmemorativos del año). "
En una empresa donde trabajaba, solíamos festejar los cumpleaños de la semana, los viernes a la siesta.
Esto nos significaba un "medio feriado" semanal, entre el tiempo que felicitábamos a los homenajeados, y escuchábamos sus patéticas reflexiones acerca de lo que era tener un año más; luego venía el brindis, unos sandwichitos y podíamos desentendernos del cumpleañero desplazándonos lentamente hasta donde estaban las pasantes, siempre sonrientes y con cara de "ahora te doy bola, pero esperá a que esté efectiva"...
Todo anduvo bien, hasta que al jefe se le ocurrió una magnífica idea: ¿Porque no hacemos como en el Jardín de Infantes y festejamos todos los cumpleaños del semestre un sólo día? De esta manera, no van a tener que molestarse organizando los festejos, ni preocuparse de que los viernes se les atrase el trabajo...
Pobre, el tipo vivía en un termotanque. ¿Preocuparnos porque el viernes se nos atrase el trabajo?. Si para eso están los lunes, para hacer el trabajo del viernes.
Bueno, la cosa al final quedo en la nada, porque pudimos convencerlo de que el hecho de perder medio día del viernes felicitando a nuestros compañeros, repercutía en la moral del grupo, y sin duda, la productividad se iba "pum para arriba".
Que buenas épocas aquellas. Nunca pude entender porque con tanta buena gente y tanto ingenio, la empresa se fundió.